FRAGMENTOS DE UN FUTURO LIBRO

La luna brilla al igual que  mis ojos. -miró a los míos y algo sorprendido continuó-  ella sabe que la luz de los tuyos es artificial, tomó un poco de aire.- ¡dice que es el momento!...shhh ¿lo oyes? pronto con sus rayos iluminará todo lo que este a su alcance y  morirá...yo no quiero...lágrimas empezaron a caer de ambos rostros se desnudaba algo dentro de mí.

-Quiero saber de ella.- Descuida la próxima vez que venga por ti traeré información. - ¡Ahora!, sé que conoces algo.- 

-Bueno podría decir que ella era una Diosa la primera vez que bajó a la tierra llevaba en sus manos un clavel, los hombres admiraban su belleza, pero quedaban impactados por la luz de la flor dicen que subió a la montaña más alta y la plantó para que pueda dar un poco de brillo al planeta, el hombre que llegase a intentar arrancarla morirá junto a ella y saldrá luz de su cuerpo iluminándolo todo  por varias horas; hombres, mujeres, ancianos y niños que no cubran sus ojos quedarán ciego de por vida al igual que sus futuras generaciones...y

-Espera, debajo de mi cama hay uno.- tengo que irme- míralo es como el del cuento, ¿ves su brillo?,

por un instante el hermano mayor creía haber visto también la luz.

Apenas se durmió fui a preguntarle a una enfermera del psiquiátrico si en el jardín habían claveles, efectivamente en el pequeño edén había una cantidad innumerable de flores pero ella no distinguía entre una u otra.

John Arteaga